lunes, 28 de diciembre de 2009

Comida en "La Bomba"

Hola amigos del Garigolo.

El pasado domingo día 27 El Garigolo celebraba una jornada de convivencia en el entorno de "La Bomba".

El evento se inició a las nueve de la mañana en la plazuela de la iglesia de Peraleda donde habíamos quedado todos los miembros del grupo y algunos arrimados.

Nos presentamos poco más de la mitad de los que en un principio nos habían confirmado su asistencia: cenas la noche anterior, pereza de madrugar un domingo, miedo a los charcos o a la helada, fueron las justificaciones de los que se sumaron a la hora de la comida. Otros ni se presentaron.

La marcha se desarrolló por la finca de Casasola visitando la laguna grande, la pila Carreño, el Canchal de Pablo, bajando por el curso del arroyo de Santa María hasta los molinos, donde recogimos la basura depositada por diferentes eventos como los calbotes, meriendas del miercoles de ceniza, etc. A decir verdad, en ésta ocasión no había mucho, también porque debido a las últimas lluvias seguramente el arroyo se ha encargado de trasladarlo aguas abajo. En fin, desde aquí un llamamiento a todos éstos grupos de chavales jovenes, y no tan jovenes que frecuentan éste, que es uno de los parajes más bellos de nuestro pueblo, para que no dejen los desechos de lo que ellos ya no necesitan, que la naturaleza tampoco los quiere para nada. No cuesta nada llevarse unas bolsas, recoger la basura y depositarla luego en cualquier contenedor del pueblo, que no en los que hay en la casa de "la bomba", que esos siempre están llenos, a pesar de las veces que se ha avisado en el Ayuntamiento.

Bueno, una vez hecha la crítica, volvemos a lo que nos interesa: la fiesta del Garigolo.

La comida se desarrolló en un ambiente muy cordial y festivo, hasta tal punto que no dió tiempo a recoger las mesas y ya estaban las zambombas, panderetas y botellas sonando, la gente cantando y los niños corriendo.

Los villancicos dieron paso a la música de discoteca, las copas y el baile hasta el anochecer, donde volvimos a colocar las mesas para la cena de los que iban quedando en el lugar.

Como prueba de todo ello podeis observar las fotos de éste día tan especial para nuestro grupo.

Un deseo para el próximo año: que volvamos a disfrutar de la montaña y de la convivencia del grupo como lo hemos hecho en éste que ahora termina.

Salud y un abrazo para todos vosotros y vuestras familias.























































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